COMIENCE ELIGIENDO SUS DISCIPULOS

Comience  Eligiendo  sus  Discípulos

Jesús, el Maestro de los maestros buscó entre las multitudes, encontró a doce personas que querían pagar el precio de ser sus seguidores; los llamó, los instruyo y las mandó al mundo a que hicieran lo mismo. Les ordenó HACER DISCIPULOS.

-        ¿Cómo pensamos nosotros que se HACEN los discípulos hoy?

-        ¿Podemos encontrar alguna manera mejor de HACER discípulos que la que hizo Jesús?

-        ¿Cuál es la poderosa razón por la que el Gran Maestro ordenó que HICIERAMOS discípulos?

Estos y otros interrogantes serán tenidos en cuenta a lo largo del presente Módulo. Pero estamos obligados a imitar la manera que Jesús tuvo para HACER discípulos. Manera que también es realizada por Pedro, Bernabé, Juan, Pablo y Timoteo, entre otros.

Vamos a leer los evangelios bajo esta lente de los HECHOS, y vamos a renunciar abiertamente al sistema tradicional pagano-romano para CONSTITUIR y/o FORMAR la Iglesia.

“Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el   cielo y en la tierra. Por tanto, ID, y HACED discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; ENSEÑÁNDOLES que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”.                                                    Mateo 28:18-20

Jesús ordenó explícitamente que debiéramos IR Y HACER discípulos

Ningún verdadero cristiano cuestiona esto que llamamos LA GRAN COMISION, es más, siempre se predica y se recalca el hecho de extender el evangelio a todas las naciones, pero lo que está en juego es la FORMA de hacer esos discípulos.

Que las personas se entreguen a Cristo no es HACER discípulos. Verlas todos los cultos en el templo no es HACER discípulos.

Un discípulo es alguien tan especial que necesitamos revisar profundamente la Biblia para acercarnos debidamente. Ahora haremos algunas preguntas a esta Palabra tan conocida y defendida por los cristianos de HACER discípulos.

-        ¿Sabemos qué significa ser discípulo?

-        ¿Cómo es la vida de un discípulo?

-        ¿Cuáles son sus características sobresalientes?

Discípulo significa: EL QUE VA A VIVIR CON SU MAESTRO. La figura del discípulo se toma de la figura del hijo de seis años que aprende el oficio con su padre. Es muy posible que Jesús desde los seis años, aproximadamente, haya entrado en la carpintería de José para aprender el oficio de carpintero. Un niño de seis años tiene como atracción principal el juego, de manera que “tocando” los elementos de carpintería estaba en condiciones de aprender. También es posible que Pedro se haya embarcado a los seis años con Jonás su padre para aprender el trabajo de la pesca. ASÍ ERA CULTURALMENTE. NADIE LO DISCUTIA. No había escuelas de orientación vocacional. Sencillamente los hijos seguían con los oficios, trabajos, ocupaciones, profesiones de sus padres y esto se hacía por generaciones. El aprendizaje de un discípulo en definitiva era teórico y práctico en todos los sentidos. No existía una cosa sin la otra y viceversa.

Cuando Pedro recibió el llamado de ser pescador de hombres sabía perfectamente que Jesús lo llevaría a tener contacto con la gente. Sabía que “aprender” el oficio de pescar hombres implicaba “tocar” a la gente. Jesús también sabía que Pedro y todos sus discípulos iban a equivocarse pero eso no los descalificaba, al contrario, eso significaba que están aprendiendo el oficio para llegar a todo el mundo; tal como fueron enviados.

Si alguien quería involucrarse como discípulo de Jesús debía pesar muy bien algunas cosas. Recordemos cuando nuevas personas querían sumarse a la vida de Jesús y Él relata lo de los pájaros con sus nidos, las zorras con sus cuevas, pero “el Hijo de Hombre” no tiene donde recostar su cabeza.

La estocada final de Jesús para desalentar al nuevo seguidor era:

“Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios”.                                                    Lucas 9:62

-        Sabiendo en líneas generales qué es un discípulo entonces hagamos la pregunta del millón: ¿CUÁNTOS  DISCÍPULOS  TIENES  TU?

-        He predicado a muchas personas de Cristo, me respondió un pastor que había desarrollado su ministerio por tres décadas.

-        Bien, volví a preguntarle: ¿Entonces cuantos discípulos tiene?

-        Dijo consternado: Considero que no tengo discípulos, solo he producido creyentes en Cristo.

EL PROBLEMA ES QUE NO REPRODUCIMOS DISCIPULOS

No es fácil identificar cuándo es que hemos cambiado los conceptos, pero hoy no procuramos tener DISCÍPULOS, a las iglesias les interesa tener miembros. El concepto de DISCIPULO fue cambiado por el de miembro y nada tienen que ver uno con el otro. Los pastores hemos trabajado mucho pero cosechamos poco porque no tenemos DISCÍPULOS; solo hemos logrado creyentes en Cristo, que en su mayoría son solo simpatizantes del evangelio.

IR, HACER Y ENSEÑAR

JESÚS NOS ORDENO IR - Pero hoy nosotros esperamos a que “vengan” al templo.

JESÚS NOS ORDENO HACER - Nosotros nos conformamos con que “vengan” a cantar unas horas a la semana y “reciban” la predicación en el culto.

JESÚS NOS ORDENO ENSEÑAR - Nosotros solamente pasamos “información” cristiana. La enseñanza tiene que ver con la vida, no con la teoría. La enseñanza para discípulos es FORMACIÓN no información.

HACER  DISCÍPULOS  SIGNIFICA  TOCAR 

LAS  VIDAS DE  LAS  PERSONAS  PARA  SIEMPRE

Para ampliar este concepto descargue de la página de la ESCUELA MINISTERIOS – ¿Evangelismo es lo mismo que Discipulado?

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PROCESO DE SELECCION

Marcos  3:1  (La señal del hombre de la mano seca.)

“Otra vez entró Jesús en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía seca una mano.

Y le acechaban para ver si en el día de reposo le sanaría, a fin de poder acusarle.

 Entonces dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate y ponte en medio.  Y les dijo: ¿Es lícito en los días de reposo^[b] hacer bien, o hacer mal; salvar la vida, o quitarla? Pero ellos callaban. Entonces, mirándolos alrededor con enojo, entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y la mano le fue restaurada sana.

 Y salidos los fariseos, tomaron consejo con los herodianos contra él para destruirle.

La multitud a la orilla del mar

 Marcos 3:7  Más Jesús se retiró al mar con sus discípulos, y le siguió gran multitud de Galilea. Y de Judea, de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del Jordán, y de los alrededores de Tiro y de Sidón, oyendo cuán grandes cosas hacía, grandes multitudes vinieron a él.

Y dijo a sus discípulos que le tuviesen siempre lista la barca, a causa del gentío, para que no le oprimiesen.  Porque había sanado a muchos; de manera que por tocarle, cuantos tenían plagas caían sobre él.

 Y los espíritus inmundos, al verle, se postraban delante de él, y daban voces, diciendo: Tú eres el Hijo de Dios.  Más él les reprendía mucho para que no le descubriesen.

Elección de los doce apóstoles

Marcos 3:13  Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él.  Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar, y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios: a Simón, a quien puso por sobrenombre Pedro;  a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del trueno; a Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simón el cananista,  y Judas Iscariote, el que le entregó. Y vinieron a casa.

GRANDES MULTITUDES…

GRANDES MULTITUDES SALIERON A VER A JESÚS

GRANDES MULTITUDES SON LAS QUE SE BUSCAN HOY…

GRANDES MULTITUDES –SE CREE- SON LAS QUE HOY ASEGURAN LA EXISTENCIA DE UN “MINISTERIO EXITOSO”

GRANDES MULTITUDES NO ASEGURAN NADA EN LA EXTENSIÓN DEL EVANGELIO DEL REINO DE DIOS.

GRANDES MULTITUDES NO SIGNIFICAN NADA PARA JESÚS.

GRANDES MULTITUDES RECIBIERON PARÁBOLAS PERO A LOS DISCIPULOS LES HABLABA CLARAMENTE.

GRANDES MULTITUDES HACEN HOY FAMOSOS MINISTERIOS Y MINISTROS RESPETABLES.

GRANDES MULTITUDES ESCUHAN RADIO, VEN TV CRISTIANA, BAJAN INFORMACIÓN DE LA WEB, LEEN MUCHOS LIBROS Y SON INFORMADAS DE DISTINTAS MANERAS, PERO NO CUENTAN A LA HORA DE EXTENDER EL REINO DE DIOS Y CONQUISTAR LAS CIUDADES.

¡PODEMOS AFIRMAR ESTO POR LOS COMPROBANTES ACTUALES!

Grandes multitudes no fueron ni son el objetivo de Jesús. Es una evidencia si uno lee detenidamente el texto. Fíjese:

MULTITUDES                                            DISCIPULOS

1. Gran multitud de Galilea                                   Pedro

2. de Judea                                                                     Jacobo y Juan

3. de Jerusalén                                                             Andrés y Felipe

4. de Idumea                                                                 Bartolomé

5. del otro lado del Jordán                                     Mateo

6. de los alrededores de Tiro                                 Tomás

7. de Sidón                                                                      Jacobo hijo de Alfeo

oyendo cuán grandes cosas hacía,                   Tadeo

grandes multitudes vinieron a él.                     y Judas Iscariote

BUSCAR TENER GRANDES MULTITUDES ALCANZADAS CON LA PREDICA ES EL CAMINO OPUESTO AL MANDATO DE JESÚS

BUSCAR  DISCIPULOS  ENTRE  LAS  MULTITUDES

ES  EL  MANDATO  DE  JESÚS

LAS MULTITUDES VIENEN Y VAN – ¡¡LOS DISCIPULOS QUEDAN!!

Si Jesús predicara hoy –con el concepto que hoy creemos conveniente para el evangelio- Él podría sentirse más que satisfecho por semejante cantidad de personas de las siete ciudades. De cada uno de esos lugares Marcos dice que vinieron multitudes. Hoy nosotros saltaríamos de contentos. Haríamos grandes carteles y movimientos masivos si tuviéramos tal convocatoria. Pregonaríamos a los cuatro vientos nuestro “exitoso ministerio”, saldríamos a dar conferencias en otras ciudades, etc. y reproduciríamos más de lo que comúnmente hacemos; menos HACER discípulos. Porque HACER discípulos significa primero SELECCIONAR = ELEGIR, luego trabajar mucho con ellos personalmente.

-        ¿Cómo, entonces el evangelio no es para todos?

-        Si, el evangelio es para todos. Hay que predicarlo a toda criatura dice Jesús en Marcos 16.

-        ¿Entonces cómo se combina esto con la SELECCIÓN?

-        Bien, la selección de discípulos aparece como una necesidad si uno quiere garantizar la continuidad del evangelio.

-        ¡Pero eso también puede hacer la multitud!

-        No. No puede hacerlo efectivamente. La multitud puede generar un enorme movimiento de aparente “éxito” ministerial. Puede ser una buena oportunidad para el marketing; esto puede llevar a conquistar otras multitudes más, así indefinidamente. Pero no ellas califican para predicar efectivamente el evangelio.

-        ¿Puede explicar porqué no pueden hacerlo efectivamente?

-        Quiero responder con otras preguntas: a) ¿Por qué cree que Jesús teniendo multitudes de siete ciudades elige solo doce hombres? b) ¿Por qué Jesús no descansa en la capacidad que tienen las multitudes para extender el evangelio? c) ¿Por qué el final del ministerio de Jesús –luego de tres años con multitudes- termina con un puñado de personas cuando asciende al cielo? d) ¿Por qué en ese mismo momento –andes de irse- da la ORDEN de IR, HACER Y ENSEÑAR a nuevos discípulos y no a multitudes?

-        ¿Es porque Él BUSCO/ELIGIO discípulos para hacer su ministerio?

-        Correcto. Jesús nunca confió en las multitudes. Las capacidades de las multitudes son nulas para extender el evangelio. Las multitudes solamente están cuando quieren recibir algo…

-        ¿Cómo se conjuga esto de multitudes vs. Discípulos hoy?

-        Tal como ocurrió con Jesús. Las multitudes van porque quieren recibir… nada más que recibir… solo recibir y exclusivamente recibir. Las multitudes no dan nada. No se exigen para dar nada. No saben de ningún costo, simplemente porque cuando algo cuesta las multitudes se esfuman. Las multitudes son atraídas por todo aquello que sea oportunidad para sacar algún provecho. Imagínese ¿de donde salieron las multitudes que gritaban que Jesús sea crucificado? Esas multitudes aparecieron rápidamente cuando los gobernantes entregaban dinero a todos aquellos que gritaran –aunque antes recibieron milagros de Jesús o los vieron directamente-. Las multitudes siempre están bien dispuestas a recibir, aunque sea dinero para matar a quien las bendijo.

-        Con esa descripción de las multitudes ¿cómo es posible que sigamos hoy trabajando para conquistarlas?

-        Seguramente porque el sistema del mundo dice que si algo es exitoso tiene que ser muy notable, grande, populoso y multitudinario. ¡Imagínese un mundo capitalista sin éxito de cantidades astronómicas! Es imposible. Estamos tan influidos por la corriente de pensamiento de este siglo (Romanos 12) que hasta el evangelio a caído en la trampa de las cantidades.

-        ¿Los éxitos ministeriales también?

-        Los pastores de las megaiglesias son muy bien vistos. Son invitados a distintas partes a predicar, a enseñar cómo hacer para tener grandes cantidades de creyentes. Parece que ellos tienen algo así como una fórmula mágica para hacer explotar la iglesia y todos escuchan atentos. Todos quieren copiar sus métodos ungidos.

-        ¿Por qué?

-        Porque todos los pastores quieren tener “éxito” en su ministerio y si tener “éxito” significa tener miles de personas en la iglesia entonces quieren saber cómo atraer multitudes.

-        ¿Y… cuándo son atendidos los discípulos?

-        Nunca. No FORMAN parte del DISEÑO actual de la Iglesia en general. No son tenidos en cuenta a la hora de destinar tiempo y esfuerzos. Vimos en el 1° Nivel 1° Módulo que la tradición pagano-romana hizo estragos con la FORMA de la Iglesia en el siglo III, y esto sigue hasta hoy. Para la mayoría de los pastores actuales es suficiente con que se tenga un auditorio lleno, multitudes. Y si ese auditorio se multiplica en más capacidad y más multitudes entonces tienen un ministerio “exitoso”.

-        ¿Entonces… cómo se hacen discípulos?

-        Seleccionando personas de las multitudes.

-        ¿Por qué hay que seleccionar personas?

-        Porque no todos son aptos para ser discípulos.

-        ¿Qué se tiene en cuenta para esa selección?

-        Jesús lo explica detalladamente. Vamos a recorrer cada aptitud que Él señala. Pero vamos a poner entre paréntesis esta aclaración. Sígame:

(No tenemos problemas con que el evangelio del Reino de Dios llegue a las multitudes. Es una gran alegría ver las iglesias multitudinarias que no son personas anónimas en medio de un gentío. Si se ha trabajado correctamente con el DISEÑO del Maestro y logramos atender multitudes, Él se llevará la gloria y pasarán algunas de estas cosas: 1-Si muere el pastor o líder principal esa iglesia no se desvanecerá. 2-Seguramente esa Iglesia tendrá un alcance misionero importante en otras tierras. 3-Quien trabaje con discípulos podrá decirle al Señor en su gloria gracias por permitirme ser un siervo inútil. Bienvenidas las multitudes de discípulos)

Volvamos a las características sobresalientes de los discípulos; ellos tienen algo especial que los distingue:

¡ELLOS  ESTAN  DISPUESTOS  A  DEJARLO  TODO!

Los discípulos que siguieron a Jesús luego de ver que el joven rico se iba porque amaba sus posesiones, en esa ocasión preguntaron:

“...He aquí, nosotros lo hemos DEJADO todo, y te hemos seguido; ¿qué, pues, tendremos? Y Jesús les dijo: De cierto os digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel. Y cualquiera que haya DEJADO casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna”.                                              Mateo 19:27-29

Pero esto no es impactante para mí. Me conmueven otras cosas profundas. Me parece que este es el resultado de haber tomado antes decisiones mucho más serias que DEJAR unas cuantas cosas y afectos familiares. EL  DISCIPULO  DEBE  RENUNCIAR  A  TODO. Fíjese:

“Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará”.            Mateo 16:24-25

Esto en realidad conforma la médula espinal del discipulado. Una persona que se ha negado a sí misma el valor de cualquier cosa en la vida por seguir a Cristo, que toma su cruz, lo que es decidir su propia muerte al mundo y camina tras las pisadas del Maestro, ha determinado las cosas más importantes sobre su existencia.

Diremos también que el DISCÍPULO termina entregando también su propia vida en el martirio si es necesario. No se niega a morir por su Maestro. No se niega al sufrimiento, a la cárcel o la tortura; varios misioneros tienen esa experiencia: ESO ES SER UN DISCIPULO.

¡CREO  QUE  SE  ESTÁ  PREGUNTANDO  SI  REALMENTE

USTED ES  UN  DISCIPULO!

A un Discípulo con estas determinaciones tomadas en su vida, si usted le enseña sobre el diezmo no se sentirá afectado, no sentirá que pierde nada, sino por el contrario, que ganará mucha más bendición. Diezmará y ofrendará con alegría.

A una persona con estas determinaciones tomadas en su vida, si usted le pide que esté a cargo de trabajos en donde deba destinar esfuerzos, horarios, oración y ayuno, dedicación, etc. no sentirá para nada que es demasiado. Lo hará con alegría.

Un verdadero DISCIPULO siente que ya ha entregado su vida al Maestro y no tiene nada mas qué perder, lo ha entregado todo a su Señor y todo lo que le queda por hacer luego es parte natural de la tarea.

Si usted le enseña a un DISCIPULO que debe dejar su vida de pecado sexual, el juego y/o las adicciones, tal persona no sentirá que le están arrancando una pierna, sentirá que si Jesús se lo pide a través de su Palabra con todo su amor al Señor dejará las cosas más arraigadas. Si no les fácil dejar de lado las cosas que afectan su vida cristiana pedirá ayuda, buscará consejo y oración de personas que intercederán y lo ministrarán hasta llegar a calificar como DISCIPULO. Dejar, despojarse, quitarse de encima las cosas de la vida sin Cristo es tarea esencial para los que quieran pertenecer al selecto grupo de DISCIPULOS de Cristo. 

Si usted tiene personas con estas características en su congregación usted tiene DISCÍPULOS, de otra manera solo tiene simpatizantes del evangelio y algunos de ellos llevan décadas participando solamente de sus cultos, sentados cómodamente. Ellos están en carácter de “multitud”. Ellos están prestos para ser ministrados, bendecidos, ayudados, etc. pero cuando les pide un esfuerzo, cuando hay necesidades y trabajo duro esas personas no permanecen; se van a otra congregación donde puedan recibir más.

LA ORDEN ES:             IR - HACER - ENSEÑAR

Debemos cambiar el “vengan” por el IR y buscar discípulos.

Debemos cambiar el “recibir” por el HACER discípulos.

Debemos cambiar el “informar” por el ENSEÑAR+FORMAR a los discípulos para que vivan el evangelio.

El apóstol Pablo fue un cristiano que predicó en docenas de ciudades, alcanzó a multitudes con sus milagros; cientos de personas lo acompañaron y vieron el poder de Dios en Él cómo impactaba ciudades. Pero Pablo se tomó en serio esto de hacer discípulos; el BUSCO, FORMO Y ENSEÑÓ a: Timoteo, Tito, Filemón, Démas, Onésimo, Priscila y Aquila, Lidia, Dámaris, Marcos, Lucas, Epafrodito, etc.

Aquí es muy evidente la SELECCIÓN de personas para el discipulado. Pablo No tiene reparos en decir que fueron engendrados en el evangelio…

La autoridad de Pablo sobre ellos es por demás evidente, ya que él no los formó en un seminario “informativo”, sentados tomando notas; él los formó en el mismo campo de trabajo, tal como Jesús lo hizo con sus discípulos.

Dijimos que el discipulado es TEÓRICO–PRÁCTICO. Por eso Pablo les recordaba:

“Lo que aprendisteis y recibísteis y oísteis y visteis en mí, ESTO HACED; y el Dios de paz estará con vosotros”.          Filipenses 4:9

Un discípulo como Epafrodito muestra claro quién es su maestro.

“Mas tuve por necesario enviaros a Epafrodito, mi hermano y colaborador y compañero de milicia, vuestro mensajero, y ministrador de mis necesidades; porque él tenía gran deseo de veros a todos vosotros, y gravemente se angustió porque habíais oído que había enfermado. Pues en verdad estuvo enfermo, a punto de morir; pero Dios tuvo misericordia de él, y no solamente de él, sino también de mí, para que yo no tuviese tristeza sobre tristeza. Así que le envío con mayor solicitud, para que al verle de nuevo, os gocéis, y yo esté con menos tristeza. Recibidle, pues, en el Señor, con todo gozo, y tened en estima a los que son como él; porque por la obra de Cristo estuvo próximo a la muerte, exponiendo su vida para suplir lo que faltaba en vuestro servicio por mí”.-  Filipenses 2:25-30

¡NECESITAMOS  HOY  ESTA  CALIDAD  DE  DISCIPULOS!

LA  ORDEN  DE  JESÚS  ES  IR  –  HACER  Y  ENSEÑAR

ESTABLECER, ENVIAR Y AUTORIZAR

 

Si hubiéramos desarrollado verdaderamente el mandato de Jesús de IR y HACER discípulos el evangelio sería imparable en estos años. El mundo ya estaría a los pies del Rey de reyes. Pero hemos hecho muchas otras cosas cristianas, menos DISCÍPULOS. Tenemos hoy tantos simpatizantes del evangelio, que nosotros creemos que eso está bien, que hemos logrado el objetivo de Cristo y que nuestra tarea ha concluido con las personas sentadas en los templos.

Si Jesús hubiera dependido de las multitudes jamás el evangelio habría salido de Israel a todas las naciones. Él formó a doce hombres que sabían hacer el trabajo correctamente y los envió a todas las naciones.

ASÍ  JESUS  PENSABA  CONQUISTAR  CADA  CIUDAD

CON  EL  EVANGELIO  DEL  REINO  DE  DIOS

Cuando las iglesias cuentan por cientos o miles de personas, yo me pregunto insistentemente: ¿Cuántos discípulos habrá allí?.

-        Dicen por ahí: Tal pastor tiene 6.000 miembros ¡que impresionante!

-        Vuelvo a preguntarme: ¿Cuántos de ellos serán discípulos verdaderos?

-        ¿Pero a qué se debe la pregunta insistente sobre los discípulos?

PORQUE HOY NO SE VE EL IMPACTO SOBRE LAS CIUDADES.

-        ¿Puede explicar entonces qué relación tiene el discipulado con el impacto del evangelio en las ciudades?

-        Se lee en Hechos de los Apóstoles que solamente dos discípulos de Cristo hacían temblar las ciudades por las que pasaban. El texto dice:

“Entonces los judíos que no creían, teniendo celos, tomaron consigo a algunos ociosos, hombres malos, y juntando una turba, alborotaron las ciudad; y asaltando la casa de Jasón, procuraban sacarlos al pueblo. Pero no hallándolos, trajeron a Jasón, y a algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá; a los cuales Jasón a recibido; y todos estos contravienen los decretos de César, diciendo que hay otro rey, Jesús. Y alborotaron al pueblo y a las autoridades de la ciudad, oyendo estas cosas”.                                     Hechos 17:5-9

Los DISCÍPULOS eran considerados personas que TRASTORNABAN EL MUNDO ENTERO. Nada menos que eso!.

-        ¿Entonces que pasa hoy que contamos por miles los creyentes en Cristo?

-        No logramos ni trastornar nuestra comunidad. TENEMOS IGLESIAS MULTITUDINARIAS PERO NO IMPACTAMOS A TODA  LA  SOCIEDAD.

-        ¿A qué se debe esto?

A  QUE  TENEMOS  UN  EVANGELIO  PARA  SIMPATIZANTES, EL  EVANGELIO  DE LOS  DISCÍPULOS  NO  ESTÁ

Jesús nos ordenó ID Y HACED discípulos, de manera que vamos a estudiar cómo hizo Jesús para tener discípulos.

“Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él. Y ESTABLECIÓ a doce, para que estuviesen con él, y para ENVIARLOS a predicar, y que tuviesen AUTORIDAD para sanar enfermedades y para echar fuera demonios: a Simón, a quien puso por sobrenombre Pedro; a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del trueno; a Andrés, Felipe. Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simón el cananista, y Judas Iscariote, el que le entregó. Y vinieron a casa”.                                                      Marcos 3:13-19

1° ESTABLECER

Jesús escogió, selecciono, llamó a los que Él quiso y ESTABLECIÓ a doce hombres para que estén con Él permanentemente. ¡Qué importante! Estar con Jesús. Eso debe haber sido maravilloso. El aprendizaje allí surgió naturalmente. Vieron a Jesús hacer milagros, multiplicar los panes y los peces, resucitar a los muertos, dar vista a los ciegos; lo vieron hablando con la Samaritana, comieron en la casa de Zaqueo, lo vieron caminar sobre el mar, etc. durante tres años sus sentidos no alcanzaban a terminar de captar la enseñanza visual, teórica y práctica de cómo hacer las cosas. Esto hizo que cuando Jesús se fue al cielo ellos salieran a realizar la misma tarea que Cristo hacía; sabían hacerlo pues lo habían intentado ya con el Maestro a la par suya.

Si queremos realizar el mandato de LA GRAN COMISION realmente debemos ESTABLECER personas alrededor nuestro como discípulos. Como el mandato de HACER es determinante que SELECCIONEMOS las personas a las cuales les daremos nuestro tiempo y conocimiento de Cristo. Creo que doce es el número al que debemos aspriar. ¡Imitemos al Maestro y nos daremos cuenta porqué el seleccionó a doce!.

¿ESTABLECER para qué? Para que estén con nosotros. Simplemente para que compartan el tiempo y la vida con nosotros, para que les mostremos qué deben hacer como discípulos del Señor. Eso es todo. NO ES NADA DE OTRO MUNDO. Lo que puede pasar es que no podamos creer todavía que ésta sea la tarea en la que debemos trabajar. Algunos ven esto como una total pérdida de tiempo, otros como algo ridículo y despreciable, otros creen que esto es insignificante –claro, aquí no hablamos de grandes cantidades-; “esto no tiene pinta de éxito”.

Pero le hago un desafío: Establezca a doce personas para que estén con usted y aprendan de usted. Verá que distinta se tornará su vida cristiana.

Nunca pude saber lo que era tener discípulos hasta que ESTABLECI mis discípulos, personas en contacto directo conmigo. Es una experiencia única, totalmente distinta de todas las que uno conoce como cristiano.

Esta tarea de hacer discípulos nos incluye a nosotros mismos. No es cuestión de darle unos buenos seminarios, charlas, buenos consejos, predicaciones lindas y ya está. No, los discípulos tienen la mirada puesta en su maestro. Por esta razón muchos huyen de tener discípulos, porque son observados, copiados, imitados; como también cuestionados, desafiados y exigidos.

PERO HACER DISCIPULOS ES LO QUE NOS ORDENO EL SEÑOR

El apóstol Juan dice algo sobre la vida de Jesús y la nuestra en comparación:

“El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo”.                                    1 Juan 2:6

DESPUES  DE  ESTABLECERLOS  VIENE  EL  SEGUNDO  PASO

2- ENVIARLOS:

El paso que sigue es ENVIARLOS a predicar. Enviar a alguien a una tarea de predicación del evangelio es cosa seria. Aquí descartamos de plano todos los medios que nosotros conocemos, prensa, radio y televisión. La prédica aquí es establecer relaciones de persona a persona y créame que Jesús pensaba conquistar el mundo así: PERSONA A PERSONA. Hechos de los Apóstoles cuentan cómo se llenaban las ciudades con el evangelio del reino de Dios sin poseer ninguno de los medios que conocemos actualmente. Revise Hechos 5:27-28; 8:6-8; 9:31; 9:33-35; 11.19-21; 13:4

“¿Cómo, pues, invocarán en Aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en Aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren ENVIADOS? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!”.        Romanos 10:14-15

LOS  DISCIPULOS  QUE  ENVIAMOS  DEBEN  POSEER  AUTORIDAD

3- AUTORIZARLOS:

¡Qué difícil les resulta a los dirigentes actuales delegar autoridad!

Sienten que le arrancan un poco de corazón cuando envían a una persona porque deben AUTORIZARLO para hacer la tarea. No por nada la mayoría de las iglesias actuales son pastor-céntricas no Cristo-céntricas. Los dirigentes tienen GRAN miedo, temen perder el control de las cosas. Ese miedo no habla de otra cosa sino de falta de amor. Porque: “el verdadero amor hecha fuera el temor” (1 Juan 4:18).

Jesús nos autoriza a esto:

“Y estas señales seguirán a los que creen: en mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos y sanarán”.                                                                                                            Marcos 16:17-18

“Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia”.                                                                                                       Mateo 10:8

“He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará”.                                                                 Lucas 10:19

“De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aún mayores hará, porque voy al Padre”.                                     Juan 14:12

¿QUE  AUTORIZAMOS  QUE  HAGAN  NUESTROS  DISCÍPULOS?:

Si nos manejamos en el sistema del evangelio tradicionalista y legalista los discípulos podrán hacer poco o nada; en el mejor de los casos serán mensajeros de problemas. Todo lo hace el pastor. Todo depende del pastor. Sobre todo decide el pastor. Todas las cosas son atendidas por el pastor. De allí muchas de nuestras limitaciones actuales.

El discipulado nos exige DELEGAR AUTORIDAD sobre otros para que hagan la tarea, para que decidan sobre temas importantes. Jesús dijo a sus discípulos que ellos dieran de comer a cinco mil hombres en el desierto. ¿Cómo lo haría usted?

El principio de AUTORIDAD ESPIRITUAL es lo que el diablo respeta. No le asustan las apariencias de santidad. Tampoco se va con nuestros gritos. Él se fija si poseemos AUTORIDAD REAL.

SI  ESTAMOS  BAJO  AUTORIDAD.

PODEMOS  DELEGAR  AUTORTIDAD.

Aquí tenemos algunas respuestas a porqué hay que SELECCIONAR:

Ud. no puede mandar a cualquier persona en representación del mismo Señor a la calle, a tocar gente.

ESTABLECERLOS – tiene que ver con la permanencia, perseverancia, persistencia, capacidad de compromiso, constancia, fidelidad, lealtad, firmeza de carácter, determinación de la FE, porque tiene delante de Dios decisiones profundas de la vida ya tomadas. No puede poner su mano al arado y luego fijarse que lo que deja atrás es mejor. Jesús dice que esas personas NO SON APTAS para el Reino de Dios. No podemos establecer a cualquier persona, porque ese mismo establecer hace como requerimiento la perseverancia. Jesús les dijo:

“Pero vosotros sois los que habéis permanecido conmigo en mis pruebas. Yo, pues, os asigno un reino, como mi Padre me lo asignó a mí, para que comáis y bebáis a mi mesa en mi reino, y os sentéis en tronos juzgando a las doce tribus de Israel.”            Lucas 22:28-30

ENVIARLOS – tiene que ver con el servicio. Con la responsabilidad de hacer la tarea. De hacerla de manera excelente. Dejarlos que se equivoquen, como Pedro, pero restaurarlos y volver a ENVIARLOS. Eso tiene que ver con la práctica. Con la tarea. ¡¡Esto no es para cualquier persona!!

AUTORIZARLOS – tiene que ver con la representación que tiene esa persona. Va a al mundo como embajador del REINO DE DIOS. Autoridad significa que está autorizado a realizar todas las actividades que sean necesarias para la extensión del Reino. Pablo enseña esto a sus discípulos:

“Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.”                        2 Corintios 5:20

Voy a realizar un cuadro donde vamos a mostrar, luego explicar, las posibilidades que abre la SELECCIÓN DE DISCIPULOS.

TIEMPO DE CONGREGACION	CANTIDAD DE DISCIPULOS	GRADO DE DIFICULTAD
Congregación entre: 5 a 10 años	Puede seleccionar entre 10 a 12 personas	Muy alto grado de dificultad
Congregación entre: 1 a 5 años	Puede seleccionar entre 5 a 7 personas	Mediano grado de dificultad
Congregación entre: 0 años a 1 año recién naciendo	Puede seleccionar entre 1 a 2 personas	Nulo grado de dificultad

1° CUADRO          

TIEMPO DE CONGREGACION	CANTIDAD DE DISCIPULOS	GRADO DE DIFICULTAD
Congregación entre: 5 a 10 años	Puede seleccionar entre 10 a 12 personas	Muy alto grado de dificultad

Cuando Ud. tiene una congregación entre los 5 y 10 años de vida y los invita a todos a ser DISCIPULOS generalmente se resistirán mucho. Hay que estar preparados para escuchar mucha oposición y argumentos. Lo más probable es que si el pastor sigue adelante con el proceso de SELECCIÓN de personas para discipular algunos miembros de la congregación se vayan.

En una congregación en la cordillera de Chubut-Argentina de 8 años de antigüedad, puse al pastor sobre aviso que si él se determinaba a tener DISCIPULOS en esa congregación debía estar dispuesto a perder aquellas personas –las multitudes- que vienen a los cultos sólo a recibir. Que solo aparecen cuando viene un predicador renombrado o cuando se reparte algo…

Ese pastor pensaba que yo exageraba. Pensaba que yo estaba tratando de meterle miedo y desalentarlo. Grande fue su sorpresa… a los meses me llamó descorazonado porque la mitad de su congregación había huido despavorida. Yo volví a recordarle lo de Marcos 3. Las multitudes están ahí cuando tienen algo para recibir – ellas no dan nada-; menos tiempo, trabajo, perseverancia, compromiso y tarea que impliquen crecimiento. Eso es demasiado para los que tienen corazón de “multitudes”.

Debemos aprender a SELECCIONAR  a los que son discípulos. Quedarnos con ellos, establecerlos alrededor nuestro, autorizarlos y enviarlos. Lo único que puede impedirnos tan noble tarea es la tradición pagano-romana.

Una congregación establecida tiene generalmente gente en determinados cargos. Algunos de privilegios e intocables. Cuando el pastor diga que va a SELECCIONAR personas de su congregación para FORMARLAS como discípulos de Cristo entonces surgirán los celos, las competencias, las envidias, las culpas, las murmuraciones, las acusaciones y los dimes y diretes de todos lados. Todo eso indica que la congregación es una muestra completa de lo que hace la MULTITUD. Por ese motivo señalo que una congregación de 5 a 10 años de existencia tiene un alto grado de dificultad. Siendo las primeras de esas dificultades el hecho que el pastor no ha FORMADO discípulos durante ese tiempo y las otras, el hecho que nunca se les hablo de dejar de ser creyentes en Cristo para ser Discípulos de Cristo. El creyente cree para recibir. El discípulo está dispuesto a dar. Con Cristo a llegado a la negación de sí mismo, está dispuesto a tomar la muerte al mundo como una cruz cada día y determinado a seguir los pasos del Maestro.

Lo aconsejable es que el pastor en una congregación de entre 5 a 10 años haga un llamado simple y llano a todos a formar parte del DISCIPULADO. Luego, mientras se desarrolla el proceso de FORMACION las personas solas deciden si están dispuestas a seguir o no.

En el 2° NIVEL de ESCUELA DE MINISTERIOS se halla el material base para trabajar personalmente con los candidatos a discípulos. Por la experiencia en más de una década de FORMAR discípulos mediante discipulados se perfectamente que muchos inician felices y llenos de expectativas pero en la perseverancia, en las diversas tareas/practicas, en los desafíos las personas optan por quedarse en la congregación en carácter de discípulo o toma la decisión de buscar otra iglesia donde pueda seguir sentado recibiendo, sin entregar enteramente su vida al Señor.

2° CUADRO

TIEMPO DE CONGREGACION	CANTIDAD DE DISCIPULOS	GRADO DE DIFICULTAD
Congregación entre: 1 a 5 años	Puede seleccionar entre 5 a 7 personas	Mediano grado de dificultad

Cuando Ud. tiene una congregación entre los 1 a 5 años de vida y los invita a ser DISCIPULOS generalmente la resistencia será poca. Igualmente hay que estar preparados para escuchar alguna oposición y argumentos contrarios. Nacen los celos y los miedos de los que ya están, temen perder la exclusividad de atención por parte del pastor. Es como cuando nace un nuevo miembro de la familia, se experimenta un reacomodamiento de roles entre los niños, incluso puede haber mucha resistencia o lo que se conoce como regresión por parte de los más grandes; si habían dejado los pañales y la mamadera vuelven a reclamarlas. Superados esos miedos y celos iniciales el pastor de una congregación entre estas edades podrá medianamente SELECCIONAR discípulos. También es aconsejable una amplia convocatoria –a todos- a participar del discipulado, pero a medida que se desarrolle el mismo la SELECCIÓN natural se hace muy notable. Esta SELECCIÓN no debe desanimar al pastor. Al contrario, debe ser normal el alejamiento de las personas incorrectas. En ese caso bendigan a esas personas, denles carta de presentación o hagan el contacto con otro pastor y abran la posibilidad a que los que no quieren DISCIPULARSE puedan encontrar otro lugar para seguir sentados y cómodos, sin ningún compromiso cristiano verdadero.

Escribo sobre esto porque es notable cómo huyen despavoridos o son expulsados naturalmente los que no quieren entrar en la condición de DISCIPULOS. Incluso los pastores deben estar atentos a recibir de otras iglesias a cristianos que realmente quieren estas capacidades de DISCIPULADO, y que por distintos motivos no les dan cabida a su desarrollo espiritual en esas iglesias.

Una Iglesia de DISCIPULOS es tanto convocante como repelente –como el ministerio de Jesús-, según qué clase de cristianos desean ser las personas. Hemos recibido personas que tienen dones y ministerios en otras congregaciones pero nunca se ocuparon de DISCIPULARLOS para que pongan en práctica esas capacidades dadas por el Señor. Pero para un pastor que está luchando para convocar a las personas los primeros años de su ministerio, esta propuesta de DISCIPULADO puede resultarles adversa a las expectativas de convocatoria a muchas personas para el inicio de su congregación. Pero si la FORMA del DISCIPULADO es implementado tal como Jesús lo ordenó esa Iglesia tiene un potencial enorme, aunque las dificultades sean medianas al comienzo.

Hago el desafío a los pastores de iglesias 1 a 5 años a que inicien un programa de DISCIPULADO intenso en su congregación, con todas las alternativas presentadas anteriormente.

3° CUADRO

TIEMPO DE CONGREGACION	CANTIDAD DE DISCIPULOS	GRADO DE DIFICULTAD
Congregación entre: 0 a 1 años recién naciendo	Puede seleccionar entre 1 a 2 personas	Nulo grado de dificultad

En el ministerio que iniciamos con mi esposa en el año 2003 tuvimos la enorme bendición de comenzar de cero. Después de cinco años en el pastorado de una iglesia plana, teníamos solo las promesas y la orden del Señor de comenzar un nuevo ministerio. En la congregación que dejábamos teníamos a bendición de vivir en la casa pastoral, tener un sostén económico, todos los viáticos y servicios pagos, una congregación de alrededor de 150 personas, 17 músicos y varios líderes con un compromiso de trabajo intenso. Además teníamos una radio propia en la cual yo tenía la bendición de comenzar cada día a las 07:00hs a.m. con el programa que denominaba DESPERTAR EN PUNTO. También grababa mensajes cortos y microprogramas en la televisión estatal. Invitábamos a predicadores renombrados y llenábamos las dos canchas de paddle con tribunas que teníamos como templo.  Desarrollamos un comedor para niños y personas indigentes cuando en Argentina golpeo la crisis más profunda de su historia. Todo eso es lo que un pastor promedio quiere lograr a lo largo de su ministerio. Creo que me sentía satisfecho con lo que hacía y pensaba que allí estaba la base de mi tarea ministerial.

El llamado del Señor para salir de esas condiciones y comenzar de cero un nuevo ministerio, en la calle, sin casa pastoral –nosotros no teníamos vivienda propia-, sin sueldo, sin infraestructura, sin templo, sin líderes, sin radio, televisión y oficina equipada, era verdaderamente una locura total. Un desafío que nunca esperé enfrentar. Una novedad en mi ministerio para la cual no me sentía para nada preparado. Miraba a mi esposa y tres hijos como personas a las que expondría a limitaciones, escasez y penurias innecesarias, todo en nombre de empezar un ministerio para FORMAR una Iglesia de DISCIPULOS. El costo era verdaderamente alto y los riesgos enormes.

Después de seis arduos meses de indagación en oración al Señor y escuchar muchas veces repetidas el mismo llamamiento por parte de mujeres y hombres de Dios, fue que decidimos lanzarnos al vacio. Resulta entonces muy limitado en este espacio contar en detalles los acontecimientos familiares, las puertas que se abrieron y los milagros que siguieron a esa decisión en nuestra experiencia de vida cristiana; sólo puedo compartir algunas de las vivencias en esta ESCUELA DE MINISTERIO PASTORAL  y la experiencia personal de FORMAR una Iglesia de DISCIPULOS desde cero.

Dijimos en el último cuadro que las dificultades para desarrollar discípulos en el comienzo de congregación son nulas. El comienzo de todo edificio es su base y si esa base es sólida, está fundada en la roca y tiene el DISEÑO correcto entonces no hay que preocuparse de nada. Solo hay que trabajar intensamente, sin salirse de la orden del Señor.

Nuestro inicio estuvo marcado por la inseguridad. Sabíamos claramente que íbamos a trabajar con cristianos recién convertidos y por ese motivo teníamos que ir a buscarlos. La primera casa que se abrió atendimos a dos abuelas de sesenta y cinco y sesenta y nueve años. Dejamos todo el ministerio montado que teníamos por cinco años para empezar de cero con ellas (todos los que nos veían no lo podían creer). Pero trabajamos en las casas, visitando las familias y empezamos a bautizar los primeros cristianos. Les hicimos un llamamiento al DISCIPULADO y fueron atraídos, cuando algunos de ellos descubrieron que otras iglesias tenían “mejores programas” y cultos más bulliciosos nos dejaron. Nosotros persistimos en visitar, sanar, bautizar e invitar al DISCIPULADO. Al comienzo sentimos los cimbronazos cuando alguien que vos llevaste a Cristo te deja porque tu iglesia no resulta atractiva ni “exitosa”.

Armamos los primeros grupos. Uno mi esposa y otros yo. Tomamos materiales de otros ministerios para empezar a trabajar con los DISCIPULOS pero como se sumaron algunos hermanos ya conocedores del evangelio se entorpeció la tarea. Ellos querían reproducir más de lo que ya conocían y nosotros no supimos en esa etapa SELECCIONAR debidamente a las personas. Intentamos que todos entraran en el DISEÑO del discipulado, pero descubrimos que eso no es posible –bíblicamente no es posible-. Debo decir que nunca pensamos soltar el llamado del Señor pero estos traspiés solo nos ponían de nuevo el desafío de encontrar las maneras del Maestro para HACER discípulos.

La SELECCIÓN comenzó cuando a dos hermanas de oración, consagradas y con mucho potencial en el Señor no querían discipulado y provocaban un ambiente enrarecido en los grupos. Querían imponer “su” visión de cómo FORMAR la iglesia. Tuve que sentarme con ellas, explicarles de qué se trataba este ministerio que pretendía una Iglesia de DISCIPULOS y proponerles que si ellas no se adaptaban se congregaran en otra iglesia. Que las amábamos en el Señor pero iban a suceder dos cosas:

a-Nosotros no podríamos desarrollar la tarea de discipulado y

b-Ellas permanecerían insatisfechas y demandantes todo el tiempo.

Así fue que comenzamos con la SELECCIÓN. Pasaron muchos, pero muchos cristianos por nuestros grupos. En una oportunidad un hermano de muchos años de cristiano que empezaba a discipularse con nosotros me pregunto inquieto:

-        ¿Por qué a muchas personas que vienen a esta Iglesia, les gusta pero no se quedan?

-        Le pedí que hiciera un recuento de nuestras predicas, mensajes y momentos de enseñanzas. Luego le dije: ¿Te resulta extraño que las personas nos dejen?

-        ¿Será que no estamos haciendo bien la tarea?

-        No, le repliqué. Nosotros estamos haciendo bien la tarea. Las personas son las que no quieren que nosotros las establezcamos al lado nuestro, estar bajo Autoridad y ser enviadas a las tareas. Les parece demasiada intromisión en sus vidas, no quieren ser molestadas en su comodidad, no se deciden a dejarlo todo por el Señor. Solo quieren las bendiciones y promesas del Señor, pero quieren servirle. Prefieren las sillas impersonales de las congregaciones. Que nadie las corrija para desarrollar la vida cristiana. Prefieren su propia versión de la “iglesia”.

-        ¿Quiere decir con eso que vamos a “perder” mucha más personas?

-        Si, por supuesto. Las multitudes son exactamente eso. Muchas personas, de las cuales hay que ESTABLECER a un pequeño grupo de ellas como discípulos. Le pregunté: ¿Cuál fue tu primera impresión de nuestro ministerio?

-        ¡Me pareció que un solo culto por semana era muy poco!

-        Claro. Un solo culto –día domingo por la mañana- sonaba escaso para un cristiano promedio. Pero le dije que esperara entrar en el desarrollo del discipulado y se daría cuenta.

En ese momento realizábamos:

1.     Un solo culto de alabanza y adoración = eso era una celebración.

2.   Oración de lunes a sábado a las 6:00 a.m.

3.   Un día de célula para cada grupo

4.   Un día de discipulado teórico-práctico

5.    Un día de oración para toda la Iglesia

Sumado todo el movimiento hacia que la Iglesia toda estuviera funcionando los siete días de la semana y cada persona era requerida cinco de los seis días de la semana; sin contar las salidas a las chacras, la playa o camping donde nos reuníamos informalmente pero con un profundo sentido de comunidad.

Este ritmo de vida comunitaria como iglesia es enormemente desafiante. Hace que todas las personas acomoden su agenda de manera distinta. Los cultos no son la atracción, es decir, estar sentados escuchando no es la principal actividad. Lo principal es la ACCION personal y la FORMACION. La formación viene por estar tocando a otras personas permanentemente, desafiados a “darles de comer” a otros mientras aprenden cómo ejercitar su pequeña fe. La comunidad de DISCIPULOS requiere un grado de compromiso que muy pocos están dispuestos a pagar. Aquí no solo es recibir, recibir, recibir, sino es DAR y recibir. Ya señalamos que los discípulos están siempre dispuestos a DAR, mientras que las multitudes están dispuestas a recibir solamente. Cuando festejábamos el tercer aniversario de la Iglesia en mis palabras alusivas al momento dije:

“Este es un momento importante para la Iglesia, porque empezamos a parecernos a una Iglesia”

Estas simples y significativas palabras desataron todo tipo de comentarios: Unos veían como una exageración decir empezamos a parecernos… surgieron algunas de estas preguntas:

-        ¿Acaso qué hicimos estos tres años de trabajo?

-        ¿No habían nuevos bautizados?

-        ¿Qué clase de pastor no reconoce que su congregación no es una Iglesia desde el primer momento?

-        ¿Qué raros parámetros tiene un pastor para decir que su Iglesia después de tres años de vida empieza a parecerse una iglesia?.

En fin… cientos de preguntas se dispararon en todas direcciones. Lo que pude notar fue que a quienes nosotros considerábamos DISCIPULOS esta apreciación pastoral no los incomodó en lo más mínimo. Quienes estaban molestos eran aquellos que con mentalidad tradicional pensaban que por estar sentados todos los cultos, ellos estaban en una Iglesia. Los DISCIPULOS estaban felices que fuéramos en rumbo a convertirnos en una Iglesia bíblica finalmente.

¿Cuáles fueron los parámetros que tuve en cuenta para decir… empezamos a parecernos una Iglesia? Voy a describir solo cuatro de ellos:

1.     Los DISCIPULOS componen una comunidad de cristianos. No son una “congregación dominguera”. Se sienten unidos por un Espíritu de amor, colaboración, trabajo y esfuerzo que, como en toda comunidad humana surgen las dificultades, pero todas y cada una de ellas son atendidas y superadas totalmente para seguir a la próxima etapa. Por lo tanto trabajan todos los días en sus tareas específicas –aparte de su que hacer normal-, no esperan el próximo culto.

2.   Los DISCIPULOS ejercitan diferentes dones y ministerios. Cada uno de ellos pone lo que Dios le ha dado al servicio de esa comunidad. Los dones y ministerios son regalos sobrenaturales, así que cuando hay lugar para que se desarrollen los DISCIPULOS crecen y crecen mucho. Recuerdo que cuando hubo una actividad internacional en la ciudad un grupo de nuestros discípulos participaban en el grupo de intercesión y liberación; la sorpresa era enorme para otros líderes y pastores, estaban ante cristianos de entre seis y ocho meses de convertidos y con dones de discernimiento de espíritus y profecía entre otros, los cuales les daban una apariencia de muchos años de vida cristiana, pero no, no eran cristianos viejos, ellos eran DISCIPULOS en pleno desarrollo de los regalos entregados por el Espíritu del Señor. Solían preguntarme: ¿De dónde sacaste esas personas? ¿Qué capacitación tienen? ¿Cómo haces para descubrir sus dones? ¿Por qué los pones en tarea si no tienen años de cristianos? ¿Cómo manejas a esas personas sin que quieran pasar sobre tu autoridad? ¿Por qué no veo esos mismos resultados en mi congregación?. En fin… eran muchas las preguntas. Estos pastores me conocieron primero ministrando en una Iglesia PLANA y ahora me veían en una Iglesia de DISCIPULOS. Estuve dispuesto a compartirles todo lo que doy a conocer en esta ESCUELA DE MINISTERIOS. Para mi sorpresa, de todos mis pastores colegas sólo uno estuvo dispuesto a FORMAR una iglesia bajo el DISEÑO del Maestro. Los demás siguieron con sus cultos semanales y sus programas. No estuvieron dispuestos a pagar el precio de HACER DISCIPULOS. Enseñé en docenas de iglesia en distintos países estos mismos principios del DISCIPULADO y en todas ellas he preguntado a cada persona: ¿Cuál es tu don o ministerio? Y nunca han superado el 5% de la congregación los que saben, un porcentaje menor lo tiene en acción y todo el resto espera el próximo culto para recibir. ¿Cómo es posible concebir una Iglesia así? La iglesia es un cuerpo que desarrolla dones según 1 Corintios 12 y si no funciona así deja de ser una iglesia, es sólo un grupo de almas buenas, pero no una iglesia con el DISEÑO del Maestro. Cuando pude observar que mis DISCIPULOS entraban en el desarrollo de sus dones y ministerio les hice saber que consideraba que… estábamos empezando a parecernos una Iglesia.

3.   Los DISCIPULOS reproducen discípulos. Las multitudes reproducen multitudes. Cada uno en su especie. Quienes invitan a un culto a una persona para que conozca a Cristo, esa persona recibe la información no verbal, que la iglesia vive la vida cristiana unas horas a la semana. En la congregación lo que conocen bastante bien de los demás es su nuca. En los cultos todos miran y se sientan detrás de otros. Se torna impersonal, con desconocimiento de qué necesidades tiene el otro y sobre todo, de qué manera pueden desarrollar sus dones mientras edifican a otro. Cuando un DISCIPULO invita a alguien a conocer a Cristo lo puede hacer en una playa, una casa, un camping, en la plaza de la ciudad o una confitería. Esa persona recibe una información no verbal que el evangelio es practicable en cualquier parte y en cualquier horario. Que Dios no necesita de “ambientes” de adoración y ministración para actuar. Que las sanidades, milagros, liberaciones, profecías y todos los dones son practicables en cualquier momento y en cualquier lugar. Que el poder de Dios está disponible las 24hs. Que la salvación ofrecida por Cristo en la cruz está a mano permanentemente. Que el tiempo y lugar de bautismo puede ser como el del eunuco y Felipe. Que el hablar en lenguas y la llenura del Espíritu puede darse fácilmente en una comunidad de cristianos reunidos en cualquier parte del campo o la ciudad. Ese rompimiento de las estructuras mentales del FORMATO pagano-romano opera maravillas porque Dios se hace visible en todos y por todos los DISCIPULOS. Muestra que las cosas más sobresalientes del evangelio no pasan necesariamente dentro del templo. La vida cristiana se torna una seguidilla de desafíos y bendiciones que hacen al crecimiento permanente de cada persona de la comunidad.

4.   Los DISCIPULOS son seleccionados entre muchos. Esa es la característica sobresaliente en cuanto a cómo se FORMA una Iglesia de DISCIPULOS. Dijimos que Jesús escogió, eligió, llamó y estableció a doce personas. Pablo hizo lo mismo, predicó a miles de personas y en docenas de ciudades, pero escogió, eligió, llamo y estableció a sus discípulos de manera notable. De eso se trata buena parte del Nuevo Testamento: son las cartas del Apóstol Pablo a sus discípulos. Si usted no está dispuesto a realizar esta tarea de selección y establecimiento amontonará una buena cantidad de personas pero no tendrá DISCIPULOS. Jesús enseñó algo muy importante. Rescate la esencia de esta palabra: Mateo 13:2  Era tal la multitud que se reunió para verlo que él tuvo que subir a una barca donde se sentó mientras toda la gente estaba de pie en la orilla. Y les dijo en parábolas muchas cosas como éstas: Un sembrador salió a sembrar.  Mientras iba esparciendo la semilla, una parte cayó junto al camino, y llegaron los pájaros y se la comieron. Otra parte cayó en terreno pedregoso, sin mucha tierra. Esa semilla brotó pronto porque la tierra no era profunda; pero cuando salió el sol, las plantas se marchitaron y, por no tener raíz, se secaron. Otra parte de la semilla cayó entre espinos que, al crecer, la ahogaron. Pero las otras semillas cayeron en buen terreno, en el que se dio una cosecha que rindió treinta, sesenta y hasta cien veces más de lo que se había sembrado. El que tenga oídos, que oiga.»

Mateo 13:10 Los discípulos se acercaron y le preguntaron: — ¿Por qué le hablas a la gente en parábolas? — A ustedes se les ha concedido conocer los secretos del reino de los cielos; pero a ellos no. Al que tiene, se le dará más, y tendrá en abundancia. Al que no tiene, hasta lo poco que tiene se le quitará. Por eso les hablo a ellos en parábolas: »Aunque miran, no ven; aunque oyen, no escuchan ni entienden. En ellos se cumple la profecía de Isaías: »“Por mucho que oigan, no entenderán; por mucho que vean, no percibirán.

Mateo 13:15  Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible; se les han embotado los oídos, y se les han cerrado los ojos. De lo contrario, verían con los ojos, oirían con los oídos, entenderían con el corazón y se convertirían, y yo los sanaría.” Pero dichosos los ojos de ustedes porque ven, y sus oídos porque oyen. Porque les aseguro que muchos profetas y otros justos anhelaron ver lo que ustedes ven, pero no lo vieron; y oír lo que ustedes oyen, pero no lo oyeron.

Mateo 13:18  »Escuchen lo que significa la parábola del sembrador: Cuando alguien oye la palabra acerca del reino y no la entiende, viene el maligno y arrebata lo que se sembró en su corazón. Ésta es la semilla sembrada junto al camino.

El que recibió la semilla que cayó en terreno pedregoso es el que oye la palabra e inmediatamente la recibe con alegría; pero como no tiene raíz, dura poco tiempo. Cuando surgen problemas o persecución a causa de la palabra, en seguida se aparta de ella.

El que recibió la semilla que cayó entre espinos es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de esta vida y el engaño de las riquezas la ahogan, de modo que ésta no llega a dar fruto.

Pero el que recibió la semilla que cayó en buen terreno es el que oye la palabra y la entiende. Éste sí produce una cosecha al treinta, al sesenta y hasta al ciento por uno.”

Esto es así: Jesús describe cuatro lugares en donde cae la buena semilla que es la Palabra de Dios.

·       En el primer lugar ni siquiera nace,

·       En el segundo y tercero nace pero no vive mucho tiempo.

·       En el cuarto la semilla se hace planta y da fruto a 30%, 60% y 100%.

En nuestra experiencia ministerial al FORMAR una Iglesia de DISCIPULOS tuvimos la necesidad de contar solamente con ese 25% de nuestro esfuerzo total. La proporción es de 1 en 4. O sea que de cien personas bautizadas siempre quedarán en condición de DISCIPULOS veinticinco. Arar, plantar, regar, cuidar, etc. y sólo cosechar el 25% no parece atractivo, pero ese es el modelo enseñado por el Maestro.

Para cuando nosotros bautizamos y ministramos a unas cien personas, pudimos contar efectivamente con veinticinco DISCIPULOS. Esa era nuestra experiencia a tres años de FORMAR una iglesia bajo el DISEÑO bíblico. No contamos con todas las personas que se congregan con nosotros. No hacemos cálculos de cantidades, nos tomamos el trabajo de testear la calidad de esos DISCIPULOS. Contamos con ellos, los SELECCIONAMOS, los establecemos, les damos Autoridad y los enviamos a la tarea con los dones que el Espíritu les regaló. El efecto es que tenemos dos grupos, como Jesús. Por un lado la MULTITUD a quienes les predicamos la Palabra de Dios –la Buena Semilla- oramos por ellos, los ministramos –se sanan, se liberan y comen de la multiplicación de alimentos-, por otro lado y con el cual trabajamos: el grupo de LOS DISCIPULOS.